Obra en Obra: Fernando Palomar
Jimena Hogrebe - 26/07/2016
Por - 24/05/2013
Desde el cierre del sexenio pasado, la asignación de proyectos de obra pública por parte de Conaculta levantó muchas voces que estaban inconformes con el tema y la discusión no ha cesado. Muchos arquitectos se quejan sin considerar que ya fueron beneficiados por dichos mecanismos y proponen un sistema de concursos con procesos democráticos. ¿Será eso posible en México? ¿No ha sido ya una tradición también el formato de asignación con antifaz de concurso? Aquellos que imperaron desde décadas atrás y donde el único camino para no perder el fallo era no cometer errores en el llenado de carpetas y presentación de presupuestos y catálogos de servicios. El problema está directamente vinculado a la corrupción y va mas allá de las formas. Podría haber concursos mas turbios que asignaciones directas. Todos sabemos que algo anda mal, que se puede mejorar en beneficio del gremio de arquitectos, pero sobretodo para beneficiar a la sociedad que es quien utiliza los proyectos a pesar de que estén inconclusos o mal construídos.
Por ésta inquietud invitamos a conversar al arquitecto Alejandro Sánchez, quien ha sido ganador de concursos importantes como el Centro de las Artes de San Luis Potosí y también estuvo a cargo del Plan maestro de La Ciudadela como resultado de una asignación directa al lado del arquitecto Bernardo Gómez Pimienta.
Además de conversar acerca de su visión sobre la arquitectura y mencionar los principios bajo los cuales se rige su trabajo, Sánchez habla del sistema de asignaciones a partir de la experiencia personal. ¿Víctimas o victimarios? La pregunta está en el aire y bajo ese mismo viento las veletas tienden a formar parte del sistema sin importar que partido político esté a la cabeza. Podemos ver como promovían hace unos meses las marchas de Morena desde su twitter y posteriormente hacían la visita de obra a los proyectos surgidos del panismo y ahora están en primera fila para recibir a un “nuevo” PRI que también los llenará de trabajo.
Como bien dice Alejandro Sánchez “yo no conozco a ningún colega que haya rechazado una asignación pública por no haberse concursado”.
Más información: www.alejandrosanchezgarcia.com