Propensión hipócrita
Marlen Mendoza - 14/06/2016
Por portavoz - 14/08/2019
La Galería del 123 presentó durante el mes de junio del 2019 la muestra Eye Candy, del artista tijuanense Pablo Llana. Gran parte del trabajo de Llana se ha enfocado en investigar el consumo desmedido de comida ‘basura’ por parte de las clases sociales menos favorecidas. Es así que recupera de algunas comunidades envoltorios de productos comerciales diversos con la finalidad de encapsularlos en cajas de acrílico. Cada pieza contiene en su superficie una frase que reconfigura el consumo desde una posición crítica en relación al sistema neoliberal.
Por Carlos-Blas Galindo
Pablo Llana presenta su serie Eye Candy luego de que han transcurrido casi diez años desde que optó por utilizar como pigmentos y materiales artísticos las envolturas de productos procesados e industrializados de las marcas que en la actualidad son las más solicitadas. La fuerza expresiva de estas piezas es muy intensa, toda vez que su autor la basa en una alta agresividad, la cual es resultante de la elección que él hace de opciones estéticas tales como las de lo terrorífico, lo siniestro, la normalidad, lo nocivo, lo dramático y lo brutal.
Y es que, desde el título que acertadamente ha elegido (con el que no alude a la dulzura de la mirada, sino con el que nos reta a abrir los ojos y tomar conciencia de la perversión que subyace en el desmesurado incremento en el consumo de productos chatarra), este artista tijuanense denuncia que el hecho de que exista un proceso de manipulación con el que se quiere hacer pasar como “normal” el consumo de mercancías como las mencionadas es, precisamente, un proceso de sumisión a una normatividad que nos es impuesta desde el poder hegemónico; una normalización que, dado que es capitalista, nos perjudica como colectividad a la vez que lleva a la concentración de los ingresos en pocos individuos.
Con sus impactantes obras artísticas, Llana hace evidente que este perverso sistema engaña a los sectores mayoritarios de la población al hacerles creer que, consumiendo productos procesados e industrializados, pueden revertir o al menos mitigar el desprecio clasista que padecen por parte de la oligarquía. En su serie Eye Candy, su autor ha decidido ir más allá de los tratamientos temáticos provocativos para ahora recurrir directamente a la agitación, en tanto que hace un llamado humanista hacia lo vital, en contraposición a lo mórbido que caracteriza al capitalismo. Escuchemos el llamado visual y escrito que nos hace Pablo Llana.