Recientemente recibí una invitación por parte del equipo de Vendo Cine para ir al estreno del documental Los reyes del pueblo que no existe dirigido por Betzabé García*. Tras filmar el corto de ficción titulado Venecia, Sinaloa la directora retrata en este documental con tintes melancólicos a tres familias autocondenadas a la resiliencia.
El pueblo de San Marcos, ubicado en la sierra sinaloense, es uno de los cinco pueblos que fueron afectados tras la construcción de la presa “Picachos”, misma que abastecería de agua a la ciudad de Mazatlán. San Marcos fue el único pueblo en no quedar completamente sepultado bajo el agua y tras un intento por parte del gobierno por resarcir los daños causados por un imprudente manejo territorial, donde ofrecían un millón de pesos para reubicar a 300 familias aproximadamente, los matrimonios formados por Irineo Osuna Enciso (Jaimito) y María Aura Lamphar (Yoya), Cipriano Osuna Sánchez (Pani) y Paola Sánchez Osuna, declinaron.
Mientras a lo largo del documental vemos tardes silenciosas, pláticas extendidas, reflejos luminiscentes y mucha pero mucha agua, no queda clara la razón de la resistencia. Por una parte, existe el argumento asociado a las raíces y la nueva cotidianeidad, como aquella retratada por Pani limpiando la plaza a sabiendas de que se inundará nuevamente, sin embargo yo apelo a la nostalgia y a la resignación. Al finalizar el documental se proyecta un cortometraje realizado para el programa UpDocs de The New York Times sobre Atilano Román Tirado, líder del Movimiento por una Reubicación Justa, quién sería asesinado al aire durante un programa de radio. Quizás esa es la historia que realmente quería contar.
Hablando en términos de memoria e identidad, más allá de las pretensiones cinematográficas de la directora o la terquedad de los habitantes del fantasmal San Marcos, en Los reyes del pueblo que no existe veo nostalgia y arraigo, la misma película menciona las condiciones en las que el resto de las familias fueron reubicadas, incluyendo en tono irónico la escasez de agua. A manera pintoresca encontré un pequeño corto animado en Netflix llamado The House of small cubes (2008) dirigido por Kunio Kato, donde un señor de la tercera edad reconstruye su casa a medida que se inunda la ciudad donde vive. No pude evitar percibir el paralelismo entre el documental y esta breve ficción donde el protagonista se ancla al pasado y es retratado con nostalgia.
México está plagado de cientos de pueblos muy parecidos a San Marcos, pero más allá de las características propias del lugar, esto obedece intrínsecamente a una condición humana caracterizada por el arraigo, la memoria y la añoranza que les mantiene expectantes e infranqueables.
Vemos arquitecturas silentes en cada toma, cómplices monumentales. Yoya le sonríe a la vida y se adapta a sus condiciones actuales pensando preferentemente en ir de visita al pueblo vecino que considerar residir en él, mientras Pani reconstruye una y otra vez la plaza o limpia la iglesia. Son conscientes de su realidad pero extrañamente la adoptan y portan con orgullo, miran hacia delante, aunque en el horizonte lo único que pueden atisbar es agua.
Si están interesados podrán verla en la Cineteca Nacional y en la Casa del Cine, también pueden revisar en la página oficial cuáles ciudades la exhibirán.
Quiero agradecer la cortesía e invitación de Arturo Perez Navarro y a Vendo Cine por permitirme estas experiencias tan enriquecedoras y su búsqueda insaciable por traernos cintas que apelen a la reflexión.
*Betzabé García
Directora y productora del largometraje documental “Los reyes del pueblo que no existe” (2015), ganador del Premio del Público en SXSW, Premio de Jurado en Full Frame Documentary Festival, Mejor Documental Internacional en el Zurich Film Festival, Mejor Documental Mexicano en el Festival Internacional de Cine de Morelia, el Premio Internacional del Jurado en This Human World Festival, así como la beca de post-producción Cuauhtémoc Moctezuma de Ambulante. “Los reyes del pueblo que no existe” fue nominado a Mejor Opera Prima en los premios Cinema Eye Honors 2016 y Betzabé ganó Mejor Director de un Documental en los Premios Cinema Tropical 2016. “Los reyes del pueblo que no existe” fue incluido en la lista de las Mejores Películas del 2015 de la revista Sight & Sound. Su cortometraje documental “Unsilenced” (2016) se estrenó en el Op-Docs fórum de The New York Times.